Conocer y cuidar la piel

Conocer y cuidar la piel

Cuidemos nuestra piel, vale la pena.  Otro de los componentes que determinan nuestra salud y belleza es esa amplia cubierta que cubre nuestro cuerpo.

Sabías qué en una persona adulta, su piel mide aproximadamente unos 2 metros cuadrados. La piel es una de las partes de nuestro cuerpo que requieren mayor cuidado, además también necesita que la mimes y la consientas todo el tiempo.

La piel es muy importante como parte de nuestra apariencia estética. Una tiene que ser consciente que para tener una piel bella, ésta tiene que ser una piel saludable.

Uno de los secretos para tener una hermosa piel reside en el hecho de mantenerse relajada. Estudios científicos han determinado que la mayor parte de los problemas y enfermedades de la piel se debe a factores relacionados con nuestras emociones, como el estrés, la ira, las preocupaciones e inclusive los celos causan disturbios en la circulación de la sangre y en la relajación de los músculos. Estas alteraciones se manifiestan en tu piel, se puede palidecer o enrojecer y además frecuentemente aparecen problemas alérgicos y eruptivos.

Así que, muchas veces, no tenemos porque buscar males donde no existen y tampoco recurrir exageradamente a remedios que no solucionarán el problema porque son exclusivamente psicológicos. Lo que tenemos que hacer es tener una vida sosegada y tranquila, practicar regularmente ejercicios de relajación (por ejemplo el yoga), tener autocontrol con las emociones negativas para poder liberarnos de estas dolencias que afectan a la belleza de nuestra piel.

Lo que acabamos de contarte es muy cierto, y más aún si somos mujeres muy sensibles; por lo tanto, somos más vulnerables a reaccionar de manera negativa y perjudicial para nuestra saludad mental y corporal. Con un mayor dominio de una misma, podemos sobrellevar de mejor manera las situaciones estresantes para conseguir una piel más saludable.

Otro de los puntos que nos cuesta hacer es consumir comida saludable. Con una alimentación saludable generamos mayores oportunidades para disfrutar de una piel sana, atractiva y reluciente. En cambio, cuando nos alimentamos con comida “chatarra” y fuera del horario incrementamos las posibilidades de que nuestra piel no se vea como quisiéramos.

Uno ejemplo de esto es lo siguiente: cuando no consumimos la cantidad de agua diaria necesaria y tampoco ingerimos alimentos ricos en fibra, terminaremos siendo víctimas de estreñimiento.

En consecuencia, al no poder eliminar los desechos, las sustancias tóxicas se acumulan en el organismo y su única salida son las vías sudoríficas, es entonces cuando aparecen inflamaciones en la piel, aparentemente inexplicables; y todo por producto de la mala alimentación.

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